Uno de los equipos más importantes que utilizan los expertos en mecánica es el gato hidráulico, que sirve para levantar un coche a cierta distancia para verificar la presencia de cualquier avería o cambiar un neumático. Los conductores deberían tener este aparato en sus automóviles, para poder resolver imprevistos en la vía o auxiliar a otras personas.
El funcionamiento de estas máquinas es fácil de comprender, ya que actúa bajo un fenómeno llamado Principio de Pascal. La palabra hidráulico se utiliza para describirlo porque estos aparatos poseen en la parte interna un líquido (generalmente se trata de un aceite) distribuido a lo largo del cuerpo.
Esa sustancia ejerce una presión sobre un cilindro que empuja a otro para que el brazo se eleve. Una vez que este fluido viaja hacia este punto accionado por una bomba, se somete a cierta presión, que surge con la acción del aire sobre el aceite para el desplazamiento y el cilindro más pequeño empujará al de mayor tamaño.
Gracias a este proceso interno, se logra el ascenso de una de las partes del gato hidráulico y, por ende, la elevación del cuerpo que se quiere revisar. Estas máquinas poseen un seguro que evita la entrada de aire en los instantes que no se esté utilizando o para impedir que se baje el brazo automáticamente.
Tipos de gatos hidráulicos
De acuerdo con los requerimientos del individuo que vaya a utilizarlo, podrá elegir entre las siguientes presentaciones:
- De botella: están fabricados con posición vertical, para hacer un contacto directo con la plataforma y el elemento que se debe reparar.
- De piso: se elaboran con un diseño horizontal, con una parte alargada que permite subir el objeto y aumentar la altura. Se usan en talleres mecánicos o vulcanizadoras.
Varían según sus capacidades particulares, los precios y las necesidades de cada experto. Son capaces de soportar hasta 20 toneladas y ocupan un espacio reducido, a diferencia de los elevadores de coche.
Si quiere tener a su disposición estos elementos, procure invertir en uno de buena calidad. Estos artefactos proporcionan tranquilidad a la hora de viajar y ayudan a solventar problemas en la carretera.